Cuando hablamos de eficiencia nos referimos a la capacidad de lograr un mejor rendimiento, con el menor uso de recursos y sin sacrificar la calidad.

En el caso de la generación y el consumo de energía, la definición no es diferente, la eficiencia energética significa producir la misma cantidad de energía con un menor empleo de recursos naturales o por el lado de la demanda, consumir menos energía sin que los resultados se vean afectados.

Llevando este concepto al sector empresarial, que consume energía y necesita invertir en eficiencia energética, la idea va más allá, se trata de un conjunto de buenas prácticas que se traducen en un menor consumo, combinado con la priorización de fuentes de generación renovable.

Si  te parecía un poco complicado este concepto, a partir de ahora lo conocerás mejor y descubrirás todas las ventajas que te ofrece. 

1. ¿Qué es la eficiencia energética?

La eficiencia energética consiste en las alternativas creadas para optimizar el empleo de las fuentes de energía. De este modo, es posible aprovecharlas, reduciendo los costos financieros y el impacto en el medio ambiente.

También podemos explicarlo haciendo una relación entre la cantidad de energía necesaria para una determinada acción y la energía total disponible para ello.

Un ejemplo básico son las bombillas LED. Puede ofrecer la misma eficiencia lumínica utilizando muchos menos vatios que una bombilla incandescente.

También transfiere menos calor al ambiente, por lo que es una excelente opción para los lugares con aire acondicionado y su duración es 50 veces mayor que un bombillo común.

Ahora imagina todo esto aplicado a otras situaciones, la eficiencia energética puede conseguirse por infinidad de medios. Algunos ejemplos son los motores de alta eficiencia, la refrigeración y los sistemas de cogeneración (donde una sola fuente puede proporcionar más de un tipo de energía).

2. ¿Cuáles son las ventajas de la eficiencia energética?

2.1. Reducción de costos

Como ya se ha mencionado, una de las principales mejoras que ofrece la eficiencia energética tiene sus raíces en lo económico. Pero cuando hablamos de reducir la factura de la luz, hay que saber que no es necesario realizar grandes inversiones de inmediato.

Una actitud sencilla y eficaz para una empresa puede ser la adopción de hábitos conscientes por parte de todas las personas que frecuentan la organización. No dejar la luz encendida en espacios que no se estén utilizando es una de las más comunes, sin embargo, casi siempre se olvida.

2.2. Mayor sostenibilidad en términos ambientales

Las acciones de eficiencia energética, en sí mismas, son un acto de consumo consciente. Esto se debe a que el uso racional de la energía ayuda a reducir la emisión de CO₂, uno de los contaminantes que más contribuye al calentamiento global.

Como medida complementaria, puedes optar por invertir en energía limpia siempre que sea posible. De este modo, también cooperas a reducir el impacto que las fuentes finitas causan en el medio ambiente.

2.3. Controlar los gastos

Con un plan de eficiencia energética, controlarás mejor los gastos y conocerás los principales consumidores de energía. En consecuencia, tendrás una mejor previsión de los gastos mensuales y puedes conocer las variables que inciden en su consumo  como por ejemplo, la temperatura exterior, época del año, fechas festivas, entre otras.

4. Mejorar el funcionamiento de los procesos

No tiene sentido desarrollar un proyecto centrado en las fuentes de energía renovables y dejar de lado la actualización de la maquinaria o los equipos que utilizas día a día. Al fin y al cabo, no tiene sentido producir energía limpia para abastecer a un sistema ineficiente que consume más energía porque está anticuado.

Por lo tanto, vale la pena investigar las innovaciones disponibles para cada tipo de necesidad. Una actitud que contribuirá a que los procesos se desarrollen de forma mucho más optimizada.

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  1. […] térmico: El aislamiento térmico es fundamental para evitar pérdidas de temperatura y mantener la eficiencia energética del cuarto frío. La normativa establece que el aislamiento debe cumplir con ciertos requisitos de espesor y […]

  2. […] térmico: El aislamiento térmico es fundamental para evitar pérdidas de temperatura y mantener la eficiencia energética del cuarto frío. La normativa establece que el aislamiento debe cumplir con ciertos requisitos de espesor y […]

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